Kéfir para niños y bebés, ¿pueden tomarlo?

El kéfir lleva popularizándose cada vez más y más entre la gente que busca cuidar su cuerpo y tener una dieta saludable. Si es tu caso, seguro que querrás poder compartir este superalimento con tu familia, incluyendo tus hijos, pero no sabes si ellos pueden tomarlo.

No te preocupes, porque aquí te vamos a explicar todo lo que debes saber antes de darle kéfir a los niños. ¡Vamos allá!

Descubre qué es el kéfir y sus beneficios

Los niños pueden tomar kefir

¿Los niños y los bebés pueden tomar kéfir?

Si conoces el kéfir, seguramente sabrás que es un alimento con muchísimos beneficios para la salud, así que sí, los niños y los bebés pueden tomar kéfir. Ahora bien, para poder hacerlo deben llegar a un mínimo de edad.

Durante los primeros meses de vida de un recién nacido, lo mejor que pueden comer es la leche materna (o materna artificial) y no es hasta los 6 meses que se comienza a recomendar introducir otros alimentos a su dieta, tales como papillas.

En el caso de la leche de vaca, es mejor empezar a dársela a los niños mayores de 1 año, pues es cuando sus pequeños estómagos desarrollan la capacidad de digerir la lactosa y la caseína de la leche.

Pues dado que el kéfir normalmente se suele preparar con leche de vaca, ya puedes suponer que la mejor edad para dar kéfir a un niño es a partir del año. Hasta entonces no es bueno dárselo, ya no solo porque puede costarles digerirlo, sino porque sus sistemas inmunológicos tampoco están preparados para sus bacterias.

Beneficios y propiedades del kéfir para los niños

Además de todas las propiedades que tiene el kéfir para los adultos, es especialmente bueno para los niños que se están desarrollando. Sus beneficios son estos:

  • Estimula el desarrollo del sistema inmunológico. Como el kéfir contiene bacterias y levaduras, la flora intestinal poco desarrollada de los niños deberá «combatir» contra estos microorganismos, fortaleciéndose y ayudándoles tanto a evitar problemas como el estreñimiento o la diarrea como a absorber mejor los nutrientes y por tanto crecer más sanos.
  • Evita futuras alergias. Este probiótico contiene una sustancia conocida como inmunoglobulina E, capaz de inhibir el alérgeno IgE, el causante de diversas alergias alimentarias, respiratorias y a fármacos. Evidentemente, por tomar un poco de kéfir no se volverá inmune a cualquier alergia, pero reducirá las posibilidades de tenerlas.
  • Sus huesos crecerán más fuertes y sanos. Gracias a que contiene mucho calcio por la leche y vitaminas como la D o la K2, las cuales ayudan a asimilar el calcio en los huesos, los niños que tomen kéfir gozarán de una mejor salud ósea.
  • Los niños enfermarán menos. Además de estimular el desarrollo del sistema inmune, también tiene propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y anticancerígenas, por lo que tu hijo enfermará menos.
  • Es un alimento muy equilibrado. A veces obviamos la buena información nutricional que tiene el kéfir, pero es un error, puesto que es un producto rico en proteínas, vitaminas y minerales y apenas tiene grasas de las malas.

Estos son solo algunos de todos los beneficios que tiene el kéfir para los niños. Como puedes ver, es un alimento bastante bueno para ellos, por lo que merece la pena comenzar a incluirlo tanto en su dieta como en la tuya si aún no lo tomas.

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¿Es cierto que el kéfir tiene alcohol?

Efectivamente, sí, el kéfir tiene alcohol y es una cuestión que le preocupa mucho a los padres. Sin embargo, los expertos ya se pronunciaron en este tema hace mucho.

El porcentaje de alcohol del kéfir es inferior al 0’7% y proviene de la fermentación alcohólica de sus bacterias. Para que te hagas una idea, es 10 veces menor que el que puede tener una cerveza así que, como dicen los médicos, no pasa nada por tomarlo.

¿Y cuál es mejor para los niños, el kéfir de agua o el de leche?

Por si no lo sabías, existen 2 tipos de kéfir, uno de agua y otro de leche. Ambos son muy beneficiosos, pero como explicamos en nuestro artículo sobre si es mejor el kéfir de leche o el de agua, a veces puede ser mejor uno u otro.

En el caso de los niños, consideramos que es mejor el de leche. En primer lugar, porque el sabor del de agua es poco probable que guste a los niños, y en segundo lugar porque es muy bueno para el crecimiento de sus huesos.

De todas maneras, debes saber que el kéfir de agua no es malo para los niños y que pueden tomarlo igual que el de leche, pero para ellos no es tan bueno.

Recetas con yogur kéfir para niños

Somos conscientes de que los niños, ya tengan 1 o 2 años, puedes ser un poco maniáticos con la comida, y si un sabor no les gusta es difícil que se lo acaben comiendo. Por ello, aquí te mostramos 3 recetas que se pueden hacer con kéfir para facilitarte el darles este yogur.

Si por lo que fuera no te acabaran de convencer estas, echa un vistazo a nuestras recetas con kéfir casero. ¡Tenemos muchas!

Y hasta aquí todo lo que debías saber antes de darle de comer kéfir a tu bebé. Ya has visto que es un alimento extremadamente bueno para ellos, por lo que te recomendamos comenzar a dárselo en cuanto puedas. Además, en Recetakefir.com encontrarás muchísima información sobre él. ¡Descúbrela!

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